El término Metamedicina® proviene del prefijo griego “meta” que significa más allá. Esto significa que la Metamedicina® trata de ir más allá de la medicina tradicional. Estamos hablando, por tanto, de una Medicina Metafísica que transciende el plano físico (cuerpo y sus síntomas) para buscar las causas psicológicas (mente) o espirituales (alma) de la enfermedad.
Se basa en una visión holística que considera que las dolencias son producto de nuestros patrones de pensamiento o creencias. De este modo, cuando una forma de hablar y pensar se vuelve costumbre, se lo termina expresando en comportamientos y posturas corporales, formas de estar y mal estar.
Bajo estos presupuestos, la Metamedicina® recupera el significado de los síntomas y entiende que la única curación auténtica proviene del deseo sincero de querer sanar. Esto puede motivar a una persona a hacer los cambios necesarios en aquellas actitudes, sentimientos y emociones que ocasionan su sufrimiento.
Al comprender el patrón de pensamiento que se esconde detrás de las enfermedades, el cliente podrá hallar las claves para lograr la auto curación.
La curación no ocurrirá con sólo conocer su causa. Porque incluso cuando se ha solucionado un conflicto o se ha liberado una emoción, el cuerpo puede necesitar un tiempo más o menos largo para proceder a la reparación del tejido o del órgano afectado.
La curación no es más que volver al estado de armonía y de equilibrio. Admitir una dificultad o una debilidad es estar ya en el camino de superarla.
La Metamedicina® se interesa en algo más que la curación del cuerpo físico de la persona, pues se centra en la asimilación de la lección que la persona afectada debe aprender para su evolución. Es una ciencia que se ocupa más del alma que del cuerpo.